
En la actividad, distintas autoridades del Sence, Ministerio del Trabajo y OTICs, junto a representantes de distintas empresas y egresados de TACAL, conocieron las nuevas instalaciones diseñadas por el arquitecto Gonzalo Mardones y atravesaron el “puente crepusculario” creado por el artista Francisco Gacitúa; un puente que transforma vidas.
En una ceremonia marcada por la emoción y el compromiso con la inclusión, Fundación TACAL inauguró este 22 de octubre sus nuevos edificios, un hito que celebra 40 años de trabajo por la empleabilidad de personas con discapacidad en Chile.
Lo que en 1985 comenzó en una casa de adobe apoyada por el Hogar de Cristo y Caritas Chile, formando a cinco jóvenes con discapacidad, hoy se ha convertido en un referente latinoamericano: más de 3.000 egresados cuentan con contratos indefinidos y aportan a sus hogares como todo trabajador.
Los dos nuevos edificios, diseñados por el arquitecto Gonzalo Mardones y conectados por un puente del artista Francisco Gacitúa, albergan espacios donde mil personas se capacitan cada año en oficios que van desde el embolsado hasta la inteligencia artificial.
Entre los asistentes estuvo Rodrigo Aguirre, uno de los cinco primeros alumnos de Tacal: “hoy trabajo en Almagro, no leo ni escribo, pero tengo dos hijos ingenieros y una nieta que es la mejor de su curso”, contó orgulloso.
Por su trayectoria, TACAL ha sido reconocida como la institución con mayor experiencia en América en inclusión laboral de personas con discapacidad y mayores. En 2016, Naciones Unidas la destacó entre las 25 organizaciones del mundo con buenas prácticas en inclusión.
Inclusión con resultados y reconocimiento internacional
“El nuevo edificio representa el futuro: un lugar donde cada persona pueda desarrollar sus talentos, aprender un oficio y encontrar acompañamiento para insertarse laboralmente”, explicó la fundadora y presidenta de la fundación, Andrea Zondek. “Después de 40 años seguimos convencidos de que la inclusión cambia vidas, familias y empresas, pero sobre todo cambia la mirada de un país”.
Desafíos pendientes
Pese a los avances, la inclusión laboral aún enfrenta grandes desafíos. Según el Censo 2024, un 11,1 % de la población chilena —casi dos millones de personas— vive con alguna discapacidad funcional. Sin embargo, menos de la mitad de los adultos con discapacidad participa del mercado laboral formal, y solo tres de cada diez empresas cumplen con la Ley 21.015, que exige reservar al menos un 1 % de los cupos laborales. De hecho, en el evento de inauguración, el Seremi del Trabajo, Andrés Arce, dio a conocer por primera vez la cifra que se ha cursado a las empresas por no cumplir con normativas de inclusión: en total $7 mil millones por no tener gestor de inclusión, no contar con planes actualizados y no cumplir con el 1% que exige la ley.
“La inclusión no puede seguir tratándose como caridad o asistencia”, recalcó nuestra presidenta. “Es justicia y también inteligencia empresarial”.
Un legado que inspira
TACAL nació del convencimiento de que el problema no está en la discapacidad, sino en el entorno que excluye. Desde su primera colocación laboral en 1989 hasta hoy, ha transformado la realidad de miles de personas y sus familias.
En la inauguración también participaron la Directora Nacional de SENCE, Romanina Morales, representantes de OTICs, empresas colaboradoras como Vitel y el restorán inclusivo Castillo Forestal, entre otras autoridades y aliados estratégicos.
Durante 40 años, en TACAL hemos demostrado que la inclusión laboral no solo transforma vidas, también aporta a las empresas y a la sociedad. Súmate tú también a este compromiso. Conoce más sobre nuestros programas de capacitación e inclusión en: fundaciontacal.cl/personas-con-discapacidad-y-familia/ y forma parte de un Chile más justo e inclusivo.